Yo entiendo perfectamente que no hay que beber y conducir. Entiendo que es peligroso y que ante una eventualidad el seguro no paga. Entiendo que si la policía me detiene puede quitarme el auto o el registro.
Entonces yo que soy una persona responsable, cuando pululo la noche porteña, no manejo. Bueno, no manejo nunca ya que no tengo ni auto ni registro, pero si lo tuviese seguramente obraría igual. Tomo un taxi.
Pero, ¿quién me cuida?. Nadie. Vuelvo a casa con un taxista que está más puesto que yo. Que no distingue el rojo del verde, la esquina de la mitad de cuadra. ¿Y quién lo controla?
Prefiero un auto conducido por un ebrio conocido que por uno desconocido. Si la opción a no tener un conductor ebrio, es tomar un taxi, Exijo que se imponga algún tipo de control sobre los taxistas.
Es por el bien y la seguridad de todos.
Desde ya, muchas gracias (?)
31 agosto 2010
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