31 octubre 2008

Mentiras Vitales

Dice Relling que las mentiras vitales son necesarias para seguir viviendo. Lo que unos llaman ideales, él le llama mentiras vitales. Asumir cierta ceguera ante la realidad y pretender aspirar a cambios que sabemos que no lograremos jamás es parte de un realismo práctico. Y creo que ésto es lo que me hace más feliz últimamente. Ver la vida con otros ojos. Tener ganas de vivirla.
Dejé el cinismo de lado (bueno, un poco :P), abandoné la postura de que un pesimista es un optimista bien informado, le sumé un poco de viento a favor y me dediqué a acumular mentiras vitales.
Una mínima esperanza de que la gente en el fondo es buena, y sólo está mal educada. (me gusta pensar a los humanos como animales sociales que son susceptibles de evolucionar sólo gracias a la educación y no por motivos instintivos- viva el conductismo (?))
Una idea de mundo mejor + una idea de que yo soy mejor (o al menos podría serlo)+ la aceptación de mi condición de no suicida (si no me puedo ir del baile, bailemos!)+un poco de sal y vinagre, hacen una perfecta ensalada.
¿Para qué poner ciertos pensamientos en el pedestal de ideales? ¿para qué tanta fanfarria?
Los ideales nos desilucionan. La vida no para de refutarnos teorías.
Cuando nuestra hipótesis se torna excepción que hace a la regla, entonces asumamos las mentiras vitales y seamos lo mas felices que podemos.


pd: relling es un personaje de Ibsen.

4 comentarios:

Tomás en Shorts dijo...

Bien por Ibsen, otro capo como Miller (me siento re culto).


Y bien por la enseñanza que te deja leer obras de teatro. me alegro y te felicito, aunque no te creo que hayas dejado (ni una parte) de tu cinismo de lado. je

chau

Mariann dijo...

vos porque no me conocias antes jejejjejejeje

Pablo dijo...

man, si seguis posteando cosas tan profundas no voy a poder comentar mas

y te digo man porque no se como se dice para mujer y como se diga seguro queda mal asique... entendes man?

Ezequiel dijo...

Mariana, el cinismo te queda barbaro. Haces un muy interesante uso de el. No lo pierdas